Barranco de la Hoz Seca y Cueva del Tornero 10/12/2011

Coordenadas GPS acceso a cueva: 40° 31´ 5647 N   1° 50´2587W  elevación 1.446 mts.
Distancia desde el Puente Checa 5,5 kms. ida.
Tiempo: 1 h 35 min.
Desnivel 100 mts.



Me ha tocado relataros nuestra última aventura. Como casi siempre aprovechamos la mínima ocasión para hacer una de nuestras salidas, esta vez Antonio y Yolanda nos hicieron de guias. Les acompañamos Ana, Angel, la hija de Antonio (Rocio), Alberto un amigo de Rocio, y  María. Nos llevaron a un corto pero agradable recorrido por el cauce del río de la Hoz Seca, con empinados cortados, hasta llegar a la Cueva del Tornero, una galería ubicada en dicha hoz.

Quedamos a las 7:20 horas para partir en dos coches en dirección a Checa (Guadalajara), sobre las 10 de la mañana llegaríamos a Molina de Aragón donde nos tomamos unos cafetitos calentitos con unas sabrosas tostadas de pan con tomate y nos aprovisionamos de unas tortas de chocolate y cabello de angel,  para ir disfrutando por el camino.
Par acercarnos al inicio de nuestro recorrido, nos fuimos a Checa donde desde el mismo pueblo cogimos un camino en dirección sur que lleva hasta la Sierra del Tremedal, descendiendo hasta la Hoz Seca, dejando los coches cerca del puente que cruza el rio, aproximadamente a unos 6 km. Hay otra manera de acceder a la Hoz Seca, a unos cuatro Kilómetros de Checa, por la misma pista que hemos cogido, por una pista que sale a la derecha a la altura de unas cabañas de ganado, señalizado con una baliza que pone Cueva del Tornero. Pero nosotros optamos por seguir con el coche hasta el puente.
La senda que cogimos parte del margen izquierdo del cauce del rio, donde el camino discurre cambiando de margen según avanzamos o por el propio cauce; en esta ocasión el rio no llevaba agua – de ahí su nombre -. Según he leído hay un refrán de la zona que dice “El Tajo lleva la fama, y la Hoz Seca el agua” – sinceramente no lo termino de “coger”, porque como no sea en primavera o invierno, en este otoño ni gota.



El recorrido por el cauce es impresionante, a través de un profundo cañón, donde las paredes en algunas zonas se estrechan hasta casi el mismo curso del rio, lo que nos obliga a andar a ratos por el mismo cauce por pedregales. Durante el trayecto vamos viendo zonas de pino silvestre, matorrales de aliagas, arces…., en definitiva un paseo que merece la pena por sí solo, donde disfrutamos un montón, y que no tiene perdida ninguna ya que además de seguir el cauce está señalizado con marcas blancas y amarillas. 
En aproximadamente hora y medio llegamos a la entrada de la cueva del tornero, a la derecha del cauce en una pequeña vaguada, a unos 15 metros de altura sobre la margen del rio, a la que debes estar atento para encontrar la cavidad, aunque ésta es grande. Pero podemos tomar de referencia que la encontraremos tras pasar un último meandro, donde en la zona superior de la pared vertical observamos un montículo enorme de piedra que sobresale en lo alto.

 
Una vez que llegamos a la entrada de la cavidad, nos dimos un homenaje – es decir un pequeño piscolabis como prevención …… del hambre (no vayais a pensar de que fuera por si nos perdíamos dentro de la cueva – que no). Una vez repuestas las fuerzas, nos enfundamos nuestros monos o ropa que no nos importara embadurnar, nuestros cascos (incluidos los de ciclistas), y como no nuestros frontales – y unas cuantas pilas por si acaso.
La entrada a la cueva no ofrece mayores problemas, después de arrastrarnos unos metros, llegamos a una galería que se ensancha y podemos ir de pie en la mayor parte de los tramos.
Para hacer el recorrido de la cueva habíamos llevado una topo de ella, que como es común en nosotros, nos la dejamos fuera en una de las mochilas….,  pero confiábamos en la experiencia previa de nuestros guias y la señalización interior. La cueva está constituida por dos galerías ortogonales entre sí; la de la izquierda es la que tiene un mayor recorrido, terminando en un sifón.Nosotros optamos por realizar el ya conocido, la galería de la derecha, donde pasamos entre derrumbes, y pudimos disfrutar de algunas coladas, así como superamos algunos tramos de galería que era posible pasarlo por arriba  o por abajo, no estando inundado
Esta galería tiene alguna ramificación que también recorrimos; aunque no hay muchas formaciones verticales, tiene un bonito colorido y gourgs de aguas cristalinas, así como zonas de los que nosotros denominamos “espaguetis”.












Tras más de dos horas en su interior, decidimos salir ya que en el regreso se nos podía echar la noche encima, tal como nos sucedió. A unos 15 minutos de la entrada, en la bifurcación hacia los dos ramales principales, mientras el resto del grupo proseguía hacia la salida, Antonio y yo nos acercamos pasando la rampa de arena que lleva a la galería de la izquierda a ver la virgen y el comienzo de la zona laberíntica.
La experiencia fue muy buena, incluso para Angel que era su primera cueva, y hemos quedado que tenemos que regresar cuando los días sean más largos, y recorrer la zona laberíntica o la otra galería.
A la salida nos cambiamos, y como no….recobramos fuerzas con otro pequeño piscolabis de los acostumbrados, esta vez más rápido ya que era conveniente comenzar la marcha de vuelta lo antes posible, por el mismo recorrido que habíamos traído.
La vuelta fue rápida y bastante novedosa, por un lado debido a la baja temperatura y que comenzaba a anochecer, a medio camino, tuvimos que hacer uso de los frontales y linternas, reflejándose en el suelo puntos luminosos que le daban una gran espectacularidad, así como el peligro de resbalones por la humedad, algo que vivimos en primera persona tanto Angel como yo.
Llegamos a los coches aproximadamente a las 18:30 horas, retomando el regreso hacia Madrid, parando antes en Molina para echar gasolina.
Aunque en esta ocasión no nos acompañó nuestro queridísimo Waldo, nos acordamos mucho de él y le echamos de menos.

Texto: Maria

Nosotros solo somos aficionados, no os guiéis por nuestras referencias, para topo y otros datos os remitimos a la pagina de la federación de espeleo que está en nuestros enlaces.

4 comentarios:

  1. Se ve que la cueva es muy guapa,lástima que los días en esta época van siendo muy cortos escaseando la luz.Hay que volver hacerla con días más alegres.Muy buena la presentación de esta salida.Felicitaciones a todo el equipo y a Waldo por su paciencia perruna al quedarse en casa.

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  2. Muchas gracias, María, por resumir tan bien nuestras experiencias del sábado. Fue una rutita diferente y la disfrutamos mucho. Gracias a Antonio y Yolanda que ya la conocían y, les gustó tanto, que quisieron compartir la aventura "cavernaria" con nosotros.

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  3. Y EN MADRID LLOVIENDO, EGGGKE HAY K MOVERSE.
    PD-WALDO YA NOS HA PERDONADO

    TONI

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  4. Maria ha hecho un buen trabajo.

    Pepi

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